El sudor excesivo en los pies y el mal olor que produce es un problema de salud bastante común que afecta a una de cuatro personas en España y que repercute negativamente en la calidad de vida laboral y social de aquellos que la padecen.

El pie posee más glándulas sudoríparas que cualquier otra parte del cuerpo y a veces los calcetines o medias y el calzado no pueden absorber tanto sudor, produciéndose un crecimiento bacteriano que es el que causa el mal olor. En la terminología médica se conoce la sudoración excesiva como Hiperhidrosis y el mal olor como Bromhidrosis.
 

DIAGNÓSTICO
 

Por lo general, no es necesario realizar el diagnóstico con ninguna prueba específica pues el paciente es bien conocedor del problema y acude a la consulta en busca de un tratamiento adecuado. En algunas situaciones, sin embargo, la causa raíz de la sudoración excesiva puede ser un signo de otros problemas médicos más complicados.
 

TRATAMIENTO
 

Existen cremas, sprays de aplicación diaria que reducen el problema y polvos pèdicos eficaces de larga duración que reducen el crecimiento de las bacterias que causan el mal olor. Otros procedimientos usados en casos extremos pueden ser por corrientes eléctricas o con inyecciones de toxinas botulínicas para reducir la cantidad de sudor en los pies.
 

SIN TRATAMIENTO
 

El sudor excesivo y el mal olor, si no se tratan, hará que las personas que lo padecen sigan sufriendo sus consecuencias negativas.
 

PREVENCION
 

Es muy importante para reducir el mal olor, ducharse diariamente y secarse bien entre los dedos. También se deben cambiar los calcetines todos los dias y no usar los mismos zapatos dos días seguidos. Se deben usar calcetines de algodón en lugar de sintéticos y preferiblemente calzado transpirable.